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Desde 2015, Valencia forma parte de los programas de la UNESCO y la Organización Mundial del Turismo para promocionar el Programa de la Ruta de la Seda, un concepto acuñado por un geógrafo alemán en 1877 para identificar una serie de rutas comerciales de mercancías como la seda, la cerámica y las especias desde China a Europa.
En el barrio valenciano de Velluters (que significa terciopeleros) había unos 5.000 telares de seda a finales del siglo XVIII. Hoy conserva su sabor antiguo con grandes mansiones, como el Palacio Tamarit, y un enmarañado laberinto de calles que permiten comprender la importancia de esta industria entre los siglos XV y XVIII en Valencia. Es en este barrio donde se encuentra el Colegio del Arte Mayor de la Seda, fundado en 1686 y que hoy alberga el Museo de la Seda. Edificio de estilo barroco, alberga el mayor archivo gremial de Europa, una excelente colección de tejidos de seda y telares del siglo XVIII que pueden verse en funcionamiento. Aquí comienza la Ruta de la Seda de Valencia, un recorrido con varias paradas que descubre el valioso legado histórico, arquitectónico y artístico que dejó el comercio de la seda en la ciudad.
Administrador de fincas en Valencia y Provincia
Ruta de la SedaLa Ruta de la Seda fue una red de rutas comerciales que surgió a partir del comercio de la seda china en el siglo II a.C. y se extendió por el continente asiático llegando hasta el Mediterráneo Occidental. Gracias a los musulmanes, la seda llegó a la Comunidad Valenciana donde su cultivo, su fabricación y su comercialización adquirieron gran notoriedad internacional.
Valencia es un referente entre las ciudades de las rutas occidentales de la seda por sus múltiples vínculos con los corredores comerciales de este tejido. La manufactura valenciana de la seda se inició en época musulmana pero el notable crecimiento experimentado por esta industria se produjo principalmente con la llegada de artesanos genoveses, cuya avanzada tecnología permitió alcanzar una especialización artesanal en tejidos de seda de alta calidad. Este tejido representó, desde el siglo XV hasta el XIX, la industria más potente de la ciudad de Valencia, y parte de su legado fue el Mercado de Mercaderes, también conocido como Lonja de la Seda, y el Colegio del Alto Arte Mayor de la Seda – Museo de la Seda. En el siglo XVIII, Valencia se convierte en el principal centro sedero español, sobre todo a partir del declive de la producción de Toledo. Es el siglo de oro de la seda valenciana. En aquella época, veinticinco mil personas se dedicaban a la industria de la seda en la ciudad, que contaba con más de cuatro mil telares. A partir del siglo XIX, la producción y el comercio de la seda decayeron, sin embargo la tradición continúa hoy a través de la indumentaria de algunas de nuestras fiestas, como las Fallas, cuyos trajes representan una manifestación única de la belleza de los tejidos de seda.
Administrador de fincas en Valencia y Provincia
El pasado mes de octubre, durante la ‘Unesco París’, se decidió que Valencia se convirtiera en la ‘Ciudad de la Seda’ en 2016, todo un honor que mostrará al mundo las tradiciones sederas de Valencia en su capital del Turia. “Esta iniciativa, respaldada por los ciudadanos y los institutos valencianos, espera unir a las ciudades tanto a través de la cultura como del marketing”, tal y como afirman sus organizadores. Pero, ¿qué representa la seda para la Comunitat Valenciana? ¿Es cierto que este material ha estado presente en España mucho antes de ser descubierto por Marco Polo?
Aunque el Programa Integral de Estudios de las Rutas de la Seda fue creado en 1987 y formalizado en 1994 por ministros de más de una docena de países, ni Valencia ni ninguna ciudad española estuvieron presentes, ignorando un importante legado sedero. Gracias a la universidad de Valencia y al centro Unesco Valencia, España ocupa ahora su lugar de honor entre las 32 naciones elegidas por el Comité de las Rutas de la Seda; por si fuera poco, Valencia será la protagonista este año – Una forma perfecta de recuperar el espíritu que caracterizó este viaje hace 2.300 años, tal y como afirmó José Manual García Margall.
Necesito faaaans (Escena película Scream 4)
Si estás en Valencia o ya la has visitado, puede parecerte que 48 horas es muy poco tiempo para visitar la ciudad. Con este post pretendo trazarte una guía detallada, y con la ruta que te propongo, te prometo, ¡no te perderás ningún edificio ni rincón bonito que ver!
La ruta que te proponemos comienza en las Torres de Serranos. Desde estas antiguas puertas de acceso a la ciudad se puede subir y desde lo alto disfrutar de unas vistas increíbles sobre todo del centro histórico, la entrada cuesta 2€ y los domingos y festivos el acceso es gratuito.
Continuamos el recorrido por la calle Serranos, justo detrás de la fachada principal de estas torres. Me encanta pasear por estas calles y perderme por los numerosos callejones laterales que las rodean. Siempre descubro una nueva fachada preciosa y sueño con los viejos tiempos, cuando por aquí circulaban caballos y carruajes…
Al final de esta calle se encuentra la Plaza de Manises donde podemos ver la sede de la Diputación Provincial de Valencia y el magnífico edificio del Palacio de la Generalitat Valenciana (actual sede del Gobierno de la Comunidad Valenciana).
